Intento fallido de vender ropa online 🧺 | Instantes de Tiempo

 Para el cambio de armario de este año me había propuesto hacer un experimento. ⚠️ Spoiler ⚠️ No ha salido bien. El experimento en cuestión era no solo guardar la ropa de invierno y sacar la de verano. Si no que también quitar de mi armario las prendas viejas que necesitasen una buena jubilación y las que no me fueran bien, principalmente porque me quedaban pequeñas, venderlas. Esto también vale al revés en el hemisferio sur donde empezáis el invierno. 

Así que empecemos. Vamos a sacar las cajas donde guardemos la ropa de verano. Paralelamente, vamos a sacar toda la ropa de invierno del armario. Vamos a ir sacando la ropa de verano de las cajas y nos la vamos a ir probando. La que nos quede divinamente la guardaremos en su sitio dentro del armario. Pero la que no nos quede bien la apartaremos para vender. Cuando las cajas estén vacías podremos guardar la ropa de invierno limpia. 

Para este momento tendríamos que tener la habitación más despejada: la ropa de verano en el armario y la de invierno en las cajas. Ya podemos montar un set de fotografía para las prendas que vamos a vender. Para ello vamos a necesitar una habitación soleada. Podéis tomar las fotos en el suelo, sobre una cartulina blanca por ejemplo, o podéis usar un maniquí. Yo tengo un maniquí de planchado que me fue muy bien. También me ayudé del aro de luz. 

Tres opciones para fotografiar vuestras prendas ¿cuál os gusta más?

Algunos trucos para que vuestras fotos queden mejor es no tocar el móvil mientras disparáis la foto. Lo podéis hacer un disparador a distancia (muchos trípodes llevan el suyo cuando lo compráis) o si no con el botón de volumen se activa una pequeña cuenta atrás de unos tres segundos. Aseguraros que el fondo de la foto sea blanco o lo más limpio y sencillo posible. Yo añadí una planta porque escuche que se venía mejor, pero no sirvió de mucho, la verdad. 

Cuando toméis fotos. Acordaros de una toma general para que los clientes se puedan hacer una idea de la prenda. También podéis hacer fotos de los detalles. Algunas web recomiendan tomar fotos de los desperfectos que pueda tener una prenda de segunda mano. También tomad fotos de las etiquetas. Para que así puedan hacer una idea mejor del material o de la talla. Un ultimo consejo es que cuando terminéis de fotografiar la prenda la guardéis en un sitio. 

Una vez tengamos las fotos hechas ya las podemos subir a las webs para vender. Las webs donde yo probé suerte fue en Facebook Marketplace, en Wallapop y en Vinted. Os recomiendo que hagáis un copy. ¿Qué es eso? Pues un pequeño texto que utilizareis en todos lados. A modo de copiar y pegar.

Estas son las apps que yo utilicé

¿Cómo lo haremos? Buscaremos con la foto que hemos hecho de esa falda, por ejemplo, en Google Lens. Encontremos descripciones de prendas parecidas a la nuestra que podremos usar como copy. Además, también veremos los distintos precios que hay para prendas así. 

Con el tema del precio tenemos varias opciones. Podemos poner el mismo precio que tiene aún en la etiqueta si aun la conserva. Podemos poner un precio razonable que veamos en Google. O podemos poner el precio que nosotros queramos. También es cierto que hay un grupo de gente que piensa que hay que poner estas prendas muy baratas para favorecer el mercado de segunda mano. 

¿Cuál ha sido el resultado? Cero prendas vendidas; un video hecho; mucho tiempo perdido. Ahora me pregunto (y os pregunto) ¿Vale la pena vender ropa de segunda mano en España? Después de este experimento concluyo que no. Que no lo volveré a hacer. No terminé de hacer fotos a todas las prendas que tenía. Las opciones que me quedan ahora es guardar estas prendas, regalarlas a mis amigas o donarlas a la caridad. Contadme en comentarios cuál ha sido vuestra experiencia. ¡Os deseo que paséis una feliz semana y nos vemos el 10 de julio con un viaje exprés a Madrid!

Adriana