Porque SI estudiar TURISMO 🎓 Instantes de Tiempo

¿Te has preguntado alguna vez si estudiar turismo es la elección correcta para ti? En un mundo donde la industria del turismo se enfrenta a desafíos sin precedentes, es crucial explorar tanto los aspectos positivos como negativos de esta carrera universitaria. Hace un tiempo, compartí por qué no consideraba el turismo como una opción viable, pero hoy, quiero mostrar el otro lado de la moneda y explicarte por qué podría ser una decisión excelente para el futuro.

Recuerdo el primer día de clase en la universidad: nos preguntaron por qué habíamos elegido esa carrera. Creo que la mayoría estábamos de acuerdo en que nos encanta viajar. Es una carrera que implica muchos viajes por distintas razones. Algunos profesores preferían trabajar sobre el terreno y nos llevaban a conferencias en distintos lugares. Por ejemplo, asistimos a un ciclo de conferencias de turismo rural donde participaron profesionales de Austria, Francia, Italia y, por supuesto, España. Por otro lado, la mayoría de trabajos consistían en organizar viajes, así que después de los exámenes, terminábamos haciendo alguna escapadita rápida. Y, por supuesto, al graduarse y empezar a trabajar, uno puede optar por trabajos tan atractivos como el de Anna, que prácticamente ha dado la vuelta al mundo trabajando en un crucero.

Si os preocupa estar fuera de casa tanto tiempo, no os preocupéis, hay muchas posibilidades laborales. Me da miedo empezar una lista y no poder terminarla, pero creo que los más obvios son trabajar en hoteles o restaurantes. Dentro de estos ámbitos, podéis trabajar desde un pequeño y acogedor hotel en la montaña hasta un resort de lujo en el otro extremo del mundo. Lo mismo ocurre con los restaurantes. Dejadme en los comentarios otros trabajos que pueden desempeñar los graduados en turismo para ver el amplio abanico.

Pero volvamos a la universidad. Otra de las cosas que recuerdo con cariño es la gran variedad de nacionalidades que teníamos en el aula, cada uno aportando su granito de arena a nuestra educación. Además, después de tanto tiempo, conservar algunas de esas amistades es algo de lo que estoy muy contenta, pues con la edad me he dado cuenta de lo difícil que es.

Esa mezcla de personas que encontramos en la universidad era fantástica para explotar al máximo nuestra creatividad. Claro que la mayoría de profesores querían que organizáramos algún viaje, pero el de marketing quería que nuestro trabajo se centrara en la campaña de publicidad, y el de hoteles quería saber por qué nuestro hotel era mejor que el que presentaba otro grupo de la clase. Recuerdo que las presentaciones eran muy importantes; solíamos vestirnos formalmente con los colores de la empresa que habíamos creado, e incluso pedíamos a amigos o familiares que nos ayudaran con los detalles más insignificantes de nuestras campañas. En definitiva, sacaba lo mejor de nosotros y nos obligaba a trabajar en equipo, más allá de las paredes de nuestra aula. Una vez incluso secuestramos el árbol de Navidad de la facultad, pero esa es otra historia.

Una vez terminada la carrera, empezamos con las prácticas que luego abrieron algunas puertas en el mercado laboral. Como ya he comentado, hay muchas opciones, en parte porque el turismo es una de las principales fuentes de ingresos en España. Participar en ese crecimiento y en esa evolución es muy satisfactorio. Hablo de la evolución del turismo porque la industria no tiene las mismas necesidades ahora que hace treinta años, ni las tendrá dentro de treinta años. Así que si quieres ser parte de ese cambio, hay que empezar por algún lado.

El sector turístico, al igual que cualquier otra carrera, tiene sus aspectos positivos y negativos, y es esencial considerar cómo puede contribuir a alcanzar los objetivos personales. La pandemia ha tenido un impacto significativo en las salidas laborales, generando tanto desafíos como oportunidades para quienes estén dispuestos a adaptarse. Hay quienes se han quedado por el camino, mientras que otros han sido parte de este cambio.

Para aquellos interesados en ingresar al sector turístico, es crucial analizar cómo esta carrera puede alinear con sus metas individuales y mantenerse actualizados con las nuevas tendencias y tecnologías que están transformando la industria. Adaptarse a estos cambios es fundamental para tener éxito en un entorno en constante evolución. Estudiar turismo es una decisión que conlleva tanto aspectos positivos como negativos, y la elección depende en gran medida de los objetivos individuales y la disposición para adaptarse a los cambios en la industria.

Adriana