Mallorca: la joya escondida del Mediterráneo ☀️ Instantes de Tiempo

El verano pasado descubrí la serie “The Mallorca Files”. A pesar de que las Baleares suelen ser un destino muy popular entre la gente joven de mi país nunca se me había puesto a tiro. Hasta que en uno de los capítulos sale el tren histórico de Sóller. Me sorprendió bastante descubrir que en la isla tenían trenes aunque luego pensé que en pleno siglo XXI lo raro sería que no tuviesen. Bueno, pues guarde mis descubrimientos sobre la Mallorca en el fondo de mi memoria. Hasta que el otro día descubrí unos billetes de avión tirados de precio. No me diréis que soy la única que de vez en cuando va mirando ofertas.



Historia de Palma

Palma de Mallorca es una ciudad hermosa y llena de historia ubicada en la isla balear de Mallorca en España. Os dejo algunas recomendaciones de lugares que debéis visitar. Pero antes un poco de historia.

Se construyó sobre una colina dominaba la bahía de Palma, en un antiguo asentamiento talayótico. Los talayóticos fueron los primeros habitantes de las islas y se les puso este nombre porque construían atalayas. Más tarde, con el auge del poder cartaginés, a los habitantes de las islas Baleares se les contrataba como mercenarios porque eran muy buenos luchando con la onda. De hecho el término balear viene del griego lanzar, así es como surgió el nombre de Islas Baleares.

Ajuntament de Palma

Finalmente, las islas fueron conquistadas por el imperio romano y construyeron dos grandes ciudades: Palma y Pol·lentia. La capital fue fundada por los romanos en el siglo III a. C. con el nombre de Palmeria o Palma. Como curiosidad os contaré que ya en esa época había invasión de alemanes a la isla.

Los musulmanes llegaron a las islas en el siglo X y le cambiaron el nombre de Palma por Medina Mayurka. De esta época solo se conservan los baños árabes, un pedazo de muralla y algunos recuerdos en el palacio de l’Almudaina. En el siglo XII Palma tenía tantos habitantes como Barcelona y Londres de la época.

En el siglo XIII los cristianos conquistaron la isla de Mallorca y convirtieron la ciudad en uno de los puertos comerciales más ricos del Mediterráneo. Posteriormente, fue anexionado al reino de Aragón y luego al de Castilla. Llegando a ser parte de España como lo conocemos hoy en día.

Forn del Teatre

Durante esta transformación sufrió mucho por la piratería en el Mediterráneo. Durante la guerra de secesión apoyó a los Habsburgo con lo cual fue tan castigada como Cataluña. Y durante la guerra del francés recibió muchos refugiados que venían de la península haciendo que los escasos recursos de la isla fueran insuficientes para toda la población. Por ello hubo una fuerte emigración por la pobreza haciendo que mucha gente volviera de las Américas con dinero para construir pequeños palacetes que podéis ver en el centro de la ciudad.

El último boom económico que llegó a la isla fue el del turismo. En 1950 el primer avión chárter aterrizó en una pequeña pista en Mallorca cuando Palma contaba con tan solo una docena de hoteles. A partir de entonces se acuñó el término de balearización para ilustrar la construcción excesiva de su hermoso litoral. Desde entonces se ha ido evolucionando a un modelo de turismo más sostenible encarado a un turismo estable durante todo el año y encargado a un público más familiar.

Catedral de Palma

La enorme catedral de Palma, o la Seu, es el gran punto de referencia arquitectónico de la ciudad. Esta catedral gótica es una de las atracciones m as emblemáticas de la ciudad.

El templo se construyó encima de la mezquita de Madîna Mayûrqa en el siglo XIII. Los que seguís con avidez Octubre&Castillos os habréis dado cuneta que las guerras entre los católicos y los musulmanes, en Cataluña, empiezan en el siglo XI y que los castillos del siglo XIII son más palaciegos. Esto nos demuestra el avance de las guerras sobre el territorio del actual España.

La Seu de Palma

Al igual que otras catedrales europeas ha sufrido múltiples renovaciones. Los dos últimos arquitectos importantes que dejaron imprenta fueron por Antonio Gaudí y Miquel Barceló. La estructura es principalmente gótica, salvo la fachada principal, que es llamativa, bastante preciosa y totalmente híbrida, lo que más llama la atención es su fabuloso rosetón, el más grande de Europa. También cuenta con una vista panorámica de la ciudad desde su azotea.

El Castell de Bellver

Esta fortaleza de estilo gótico es uno de los pocos castillos circulares en Europa. Fue construido en el siglo XIV y ofrece una vista panorámica de la ciudad y la bahía de Palma desde lo alto de una colina. También alberga el Museo de Historia de la Ciudad.

Jaume II ordenó construirlo sobre el Puig de San Mezquida y se terminó en tan solo 10 años. Quizá lo mejor de la visita son las vistas espectaculares de Palma, la bahía y el mar. El castillo se concibió como residencia real, pero solo los reyes Sanç y Joan I lo habitaron durante cierto tiempo. En 1717 se convirtió en una prisión militar y posteriormente se utilizó en las guerras napoleónicas y en la guerra civil española. Se puede subir a la azotea y fijarse en los graffitis grabados en la piedra por los prisioneros.

Castell de Bellver


En la planta baja, el museo de historia de la ciudad repasa la evolución de Palma desde la prehistórica civilización tala Jotica hasta la actualidad.Vamos a descubrir hasta el último de sus secretos en Octubre&Castillos junto al Chateu de Versailles que visitamos en diciembre.
El Palau de l’Almudaina

Los orígenes de este palacio son un castro romano. En época islámica se sabe que ahí había una fortaleza. Después de la conquista de Jaume I se convirtió en la residencia de los monarcas hasta el día de hoy. Aunque los reyes actuales de España prefieren pasar el verano en el Palau de Marivent. Tras la muerte de Jaume III en el siglo XIV ningún rey ha vuelto a vivir allí de forma permanente

Su historia la podéis ver a través de las disposiciones de las habitaciones y su decoración. Algunas de las salas tienen el techo decorado con artesonado mudéjar. No es el único palacio que podéis visitar en Palma de Mallorca pero sin duda es el más importante.

Barrio histórico de Palma

El casco antiguo de Palma de Mallorca es un laberinto de calles estrechas y empedradas que albergan edificios históricos, plazas encantadora y numerosos restaurantes y bares. El barrio incluye la Plaza Mayor, la Plaza Cort, la iglesia de Santa Eulalia y la Plaza de la Reina.

Una de las mejores cosas que se pueden hacer en Palma es un sencillo paseo por las calles del casco antiguo. Las puertas de reja de hierro esconden los patios donde los nobles recibían a sus invitados. Los patios donde se mezclaba la vida pública y la vida privada. Hoy aún quedan unos 150 casas aristócratas, aunque la mayoría solo se pueden ver desde las puertas cerradas de hierro forjado.

Edificios Casasayas

Nunca hubiera dicho que Palma fuera un destino que destacara por su arquitectura modernista. La capital es la gran protagonista del periodo modernista de Mallorca. Lluis Domenech i Montaner fue un gran arquitecto modernista catalán, que ya hemos visitado en varias ocasiones con Instantes de Tiempo, que dejó su sello personal en el Gran Hotel, ahora la sede del CaixaForum. Fue de los primeros edificios modernistas de la isla y destacaba por tener ascensor, calefacción por vapor y electricidad.

También destacan Can Corbella de Nicolau Lliteras, los edificios de Casasayas de Francesc Roca Simó, los Almacenes Águila de Gaspar Bennàssar y la casa de les Mitges o la Casa Forteza Rey del mismo Lluís Forteza-Rey.


Y así termina nuestro viaje a Mallorca, una isla llena de belleza natural, historia y cultura. Hemos explorado su deliciosa gastronomía y sus pintorescos pueblos. También hemos disfrutado del ambiente animado de la ciudad de Palma y nos hemos relajado en el tranquilo pueblo de Sóller, que exploraremos a fondo la semana que viene. Espero que hayas disfrutado de este vlog tanto como yo he disfrutado del viaje. Mallorca definitivamente ha sido una experiencia inolvidable, y sin duda alguna, volveremos pronto a esta maravillosa isla. 

Adriana

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