El síndrome "No quiero ir al gimnasio"

Cuando era pequeña iba a karate, me he pasado la vida haciendo deporte "Porque esta niña está muy gorda" y uno de ellos fue el karate. Como no me gustaba ir me hacia la dormida -incluso me llegaba a dormir de verdad- así cuando llegaba mi madre le decía que me había dormido y que no había podido ir. 

Con el tiempo las cosas fueron cambiando, de echo no fue hasta mi último gimnasio cuando descubrí de lo que realmente era capaz de hacer y lo bien que me lo pasaba allí. Pero hace unos días, ahora que me he mudado y me he cambiado de gimnasio cuando he vuelto a sentir eso de "No quiero ir al gimnasio".

Creo que todos lo hemos sentido alguna vez. Paseas por casa cazando moscas y te encuentras, de repente, haciendo cosas que uno no hace normalmente. Te preguntas, con los ojos entrecerrados, que te está pasando. Pues muy fácil, que no quieres ir. Como dijo alguien a quien quiero mucho: "Al gimnasio no se va a sufrir si no a disfrutar". 

Si a donde vas a practicar deporte no te gusta, no te sientes a gusto, no quieres ir... no vayas. Deja de gastar dinero a lo tonto y de perder el tiempo. Así te verás obligado a encontrar algo que realmente te guste. 

Cuando lo encuentres vas a estar con gente que le gusta lo mismo de ti y además, como harás deporte, crearás más endorfinas que te harán estar más feliz y con el tiempo no entenderás como podías estar barriendo en casa en vez de ir a hacer deporte. 

Nunca creas que hay gente que no vale para el deporte, hay tantos tipos de deporte como personas en el mundo (o casi). No todos tenemos porque ser campeones de maratones o campeones olímpicos de taekwondo. No te olvides de disfrutar cada día. Si quieres saber més de deporte pasate por aquí.

M5379 



Comentarios