Palau GÜELL en BARCELONA | Instantes de Tiempo

Bienvenidos al Palau Güell. Nos encontramos en uno de los primeros edificios que construyó Antoni Gaudí, de hecho el primero ya sabéis que es la Casa Vicens que vimos en otra ocasión. Eusebi Güell, mecenas del arquitecto, pidió construir el palacio en 1885 y el proyecto termino en cinco años.



Recomiendo comprar la entrada online y recordad que el palacio es gratuito el primer domingo de cada mes. Así solo tendréis que hacer una pequeña cola a la entrada y enseguida estaréis dentro. Nada más entrar, por donde entraban todos los carruajes, tienen unas taquillas muy útiles y una maqueta del palacio, para que os hagas una idea general del palacio. 

Además, esta zona es muy interesante porque si os fijáis en el suelo veréis claramente diferenciada la zona por donde pasaban los animales y por donde pisaban los invitados de los Güell. Para facilitar el transito en esta planta, Gaudí ideo unas rampas que bajan al piso inferior donde se guardaban los animales y todo lo que tuviera que ver con ellos. Que es lo que visitamos al final. 

Fachada principal del palacio

Y luego hay una gran escalinata que invita a subir a las personas al piso superior y al corazón de la vivienda. Tiene un aspecto muy medieval, típico del modernismo catalán. Llegamos a un primer nivel que es donde el señor Güell atendía sus negocios, junto a la biblioteca, sin que nadie tuviera que entrar en el resto de las dependencias familiares. Aunque estas habitaciones están fuera del circuito he encontrado esta imagen en la página web del palacio

Finalmente, llegamos a la planta noble del Palau Güell. Una de las cosas que me causó mayor curiosidad fue ver en muchos elementos decorativos las iniciales de Eusebi Güell. La visita nos guía primero a las habitaciones interiores del palacio, donde podemos encontrar una sala de música, un umbráculo, como el que vimos en la casa Vicens, y el comedor, qué al igual que vimos en la Casa Amatller, dicho comedor contaba con un pequeño ascensor para subir la comida de la cocina situada en el piso inferior.

El comedor con el ascensor junto a la chimenea

Esta zona de la casa está conectada con una pequeña terraza y con un corredor que llevaba directamente a casa de los padres de Eusebi Güell. En esta terraza se podía acceder desde todas la habitaciones que daban a ella y, además, daba luz a los pisos inferior. La fachada opuesta a la terraza, la que da a la calle principal, es donde se encuentra una gran cristalera que ofrece luz a la sala principal del palacio. Me es difícil describirla con palabras. 

A pesar de no ser una sala especialmente grande sí que es muy ostentosa y está muy bien planificada. A un lado, como dentro de un armario, se encuentra la capilla de la familia. Del lado opuesto parte una escalera hacia los dormitorios. Durante las fiestas, esta escalera se utilizaba para colocar a la banda. La sala se alza hasta la terraza superior del palacio ofreciendo una iluminación muy decorativa y dando acceso a la vista de la sala desde los pisos superiores. 

La terraza superior

Actualmente, los dormitorios se encuentran bastante desnudos. Pero a lo largo de la visita os encontrareis unos plafones indicativos con fotos de como era la estancia originalmente. Los dormitorios del Palau Güell constaban también de baños. En esa zona también encontrareis una pequeña exposición de algunos muebles que el arquitecto diseño para el proyecto. 

De allí podréis subir a la terraza superior, el espectáculo de esta casa, a través de unas escaleras de servicio. Muy al tanto que la cubierta superior resbala. Esta terraza me encanta porque tenéis unas muy buenas vistas del barrio gótico de Barcelona. Una vez vista todo el palacio solo queda bajar al sótano para ver las caballerizas. Hechas de tal forma que soportaran el peso de todo el edificio pero facilitaran el transito de los caballos y los carruajes. 


Sin lugar a dudas, Palau Güell es una visita obligada si vas a Barcelona. Esta maravilla del modernismo catalán fue diseñada por el mago de la arquitectura, Antoni Gaudí, para el empresario Eusebi Güell. Una visita al Palau Güell es una experiencia inolvidable, ya que sus increíbles vistas desde la terraza superior y su fascinante diseño modernista hacen que sea un destino único e imprescindible. ¡No pierdas la oportunidad de conocer este lugar maravilloso y disfrutar de la entrada gratuita el primer domingo de cada mes!

Adriana

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