Lecturas en la SEU VELLA de Lleida 🤓 | Instantes de Tiempo

La Seu Vella promete entrada gratuita los miércoles por la tarde a todos aquellos que traigan un libro. Aprovechando esta oportunidad le pedí a Noemí que me acompañara. Y la gran sorpresa nuestra fue que también se pueden visitar otros espacios del Castell de Lleida. 

Así que hoy os voy a contar un poco la historia de este punto emblemático de la capital de Ponent. Porque estar en Lleida y no visitar la Seu Vella es como no haber estado. Lo castell de Lleida es un imponente edificio encima de una pequeña colina, que predomina la plana de Lleida. 

La entrada es de 16:30 a 19:30 hasta el 21 de septiembre. Pensé que el claustro no es un lugar con butacas supercómodas para leer pero eso también lo han tenido en cuenta, ya que hay unos pequeños cojines junto a una pequeña estantería por si te falta algún libro. 

La primera piedra fue colocada el 22 de julio de 1203. No es que en este lugar no se hubiera construido nada, puesto que se sabe de la existencia de una iglesia visigoda, que también fue usada a modo de mezquita, por allá al siglo X. 

En el siglo XII, las tropas cristianas ganaron la plaza de Lleida a los sarracenos y el obispo traslado la diócesis a la ciudad. También se compraron algunos terrenos adyacentes para poder construir la gran catedral. 

Uno de los espacios más bonitos es el claustro, la sorpresa de este es que no se encuentra al lado de la catedral sino a sus pies, al lado opuesto del ábside. Tampoco es completamente cuadrado porque el edificio tiene que adaptarse a la orografía de la colina. Además, si os fijáis bien, no encontrareis dos arcos góticos decorados iguales. Esta fantástica galería sobre la ciudad fue construida entre los siglos XIII y XIV. 

Otro espacio singular es el campanario, al que al menos tenéis que subir una vez en la vida. En la universidad nos contaron que había posibilidad que se construyese a imagen y semejanza de los minaretes musulmanes por el pasado islámico de la ciudad de Larida. El campanario fue terminado ya en el siglo XV. 

Ya que su origen es religioso os estaréis preguntando en qué momento se ganó el apodo de "Lo Castell". En 1707, en plena guerra de sucesión, y por su importante situación estratégica se convirtió en cuartel militar. Como lo que os conté del Castell de Cardona. Hay documentos que muestran como se prepararon las trincheras en la zona norte, en lo que hoy se conoce el parque de Santa Cecilia. Porque fue el día de Santa Cecilia que las tropas borbónicas se hicieron con el control de la ciudad. Se sabe que la Seu Vella, al igual que muchos otros castillos que habían sido utilizados para oponer resistencia a las tropas de Felipe V, iba a ser derruida. Por suerte el monarca murió antes de poder llevar a cabo su plan. Hoy en día han dejado un parque muy bonito con túneles y los pozos de hielo, que también os recomiendo visitar. 

Dado que la catedral de Lleida, ya no ofrecía servicios religiosos, se construyó la Nova Catedral de Lleida, en la calle mayor, que os la mostré en este otro video. Así que la Seu Vella paso a ser un monumento. Hasta la Guerra Civil española. 

En 1939 volvió a servir de cuartel militar y también de prisión. Imaginaros en estas capillas llenas hasta los topes donde los prisioneros malvivían unos encima de otros sin intimidad ni higiene alguna, tampoco alimento o algo para distraer sus estómagos vacíos. 

Una vez terminada la guerra la prisión se trasladó donde ahora se encuentra la Hacienda Pública. El gobierno de Franco empezó su restauración y también los usos religiosos. De hecho mi abuela, la famosa Padrina que conocéis aquí en el blog, hizo su curso prematrimonial en la Seu Vella. Podéis ver el triste aspecto que ofrecía su claustro entonces. 

Por su 800 cumpleaños se hizo una gran exposición con todas sus obras artísticas que se encuentran repartidas por el mundo. Y hace algunos años se encuentra en lista de espera para poder ser parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Recuerdo que nos explicaron el proyecto en la carrera y una de las cosas que nos explicaron y que me sorprendió mucho fue todos los kilómetros y kilómetros desde donde se puede ver la magnífica Seu Vella. 

Adriana